El nacimiento de la Fundación Un Bosque pa’ María se remonta al 30 de marzo de 2023, un día marcado por la inspiración y la gratitud hacia mi amada hija María, quien descansa eternamente desde el 13 de julio de 2022.
En honor a María y a mí misma, prau María en el pueblo de Fano se erige como un rincón más allá de lo físico; fue, es y será el lugar perfecto que María y yo siempre anhelamos. Este pequeño bosque especial se convierte en el lazo más sólido entre la ausencia y la vida, una paleta de naturaleza que se despliega como refugio, brindando consuelo y propiciando encuentros en su seno.
La conexión profunda que despertó mi hija en mí se transformó en una guía amorosa, un hilo inquebrantable impulsa a seguir su huella con comprensión y emotividad. A pesar del dolor por su partida, este proceso me otorgó la fortaleza necesaria para dar vida a Un Bosque pa María. Contando con el apoyo de personas extraordinarias, caracterizadas por su grandeza humana, esencia única y respeto profundo hacia la Madre Naturaleza, logramos convertir un sueño compartido en una realidad palpable. En este tejido colaborativo, la vida, la ausencia y la naturaleza se entrelazan en una danza armoniosa.
La fundación
Hoy, la fundación Un Bosque pa’ María se erige como una alternativa comprometida con objetivos sociales enmarcados en la educación, la cultura y la defensa medioambiental. La historia de María sigue viva en cada rincón de este bosque, y su legado continúa inspirando acciones significativas para el bienestar de la comunidad y el respeto por nuestro entorno natural.
Así, la conexión emocional con la historia de María y la belleza del prau en Fano resonarán en los corazones de muchas personas, generando un movimiento solidario extendido más allá de las fronteras de este pequeño pueblo. Deseamos convertir esta fundación en un punto de esperanza, no solo para quienes que habitan en las cercanías, sino también para aquellos que, al enterarse de la historia, encuentran en ella un motivo para contribuir a una causa noble. Las donaciones, tanto en forma de recursos financieros como en tiempo y esfuerzo voluntario, permitirán ampliar el bosque y llevar a cabo multitud de proyectos educativos y culturales en la región.
Y es que además de renaturalizar el entorno, el prau María en Fano espera transformarse en un espacio multifuncional. Los eventos culturales, talleres educativos sobre la importancia de la conservación del medio ambiente, y actividades que promuevan el bienestar emocional y la conexión con la naturaleza serán bienvenidas en él. Queremos convertirnos en un modelo a seguir en la integración de la comunidad con su entorno, destacando la necesidad de preservar y apreciar la biodiversidad local.
Con profunda gratitud hacia mi amada hija, para que en cada rincón de este bosque el espíritu de María perdure, alimentando la esperanza y la conexión entre la comunidad y la naturaleza.
Ángeles Álvarez Hevia – Fundadora
